Soy una enamorada de la vida, una veinteañera que le encanta soñar despierta, y por supuesto, conseguir todo lo que se propone. Últimamente la frase que más escucho es ¡Estas loca! y eso me encanta.

Con apenas 14 años empecé a trabajar y en cuanto pude, dejé de estudiar porque tenía claro que la fotografía era lo que me gustaba. A los 18 años comencé a estudiar de nuevo centrándome en la fotografía e hice un curso privado en Málaga de Fotografía Profesional de dos años de duración.

Como buena esteponera, me gusta estar rodeada del mar, arena, sal y sol. Y aunque recorra los mayores paraísos del mundo, siempre echo en falta mi hogar.

Soy muy extrovertida y me paso todo el día de cachondeo. Es prácticamente imposible borrar una sonrisa de mi boca. Cabezona donde las haya, y con cierto carácter, hay una voz dentro de mí que me invita a expresar lo que realmente pienso.

Tengo las cosas muy claras y organizadas. Ya con 15 años, en la primera cita con mi actual marido, le dije que tenía claro que me quería casar si o si porque era mi sueño. Y 12 años más tarde, un 18 de junio de 2022, nos casamos.

Mi cabeza es capaz de tener más ideas de las que realmente puedo llegar a procesar porque me gusta hacer muchas cosas y aprender en el proceso. Pienso que, si otra persona puede, yo también. Me encantaría saber de donde me viene este culo inquieto, porque hasta en mi familia se lo preguntan diariamente.

Me mueven los momentos vividos con las personas, esos pequeños instantes que se quedan grabados en el alma. Trabajo para conseguir congelarlos y generar una herencia familiar sin fecha de caducidad. Busco que cada una de mis fotografías transmitan emoción, no perfección.